En muchos asentamientos, un gran número de hogares viven y trabajan en ecosistemas tanto rurales como urbanos y dependen de ellos. Estos entornos sustentan la vida humana más allá del ámbito político y administrativo.
19 de julio de 2024
ONU-Habitat define estos vínculos urbano-rurales como las interacciones diversas y no lineales a través del espacio dentro de un continuo urbano-rural. Incluye los flujos de personas, bienes, capital e información, así como las interacciones entre sectores y actividades como la agricultura, los servicios y la manufactura.
Principios rectores
Los principios rectores prevén una aplicación flexible por parte de los diferentes niveles de gobierno, las organizaciones intergubernamentales, los asociados para el desarrollo y las partes interesadas del mundo académico, la investigación, la sociedad civil, incluidas las organizaciones de base, y el sector privado. Los 10 principios rectores son:
1. Intervenciones basadas en lo local
El contexto local es muy importante para que los vínculos urbano-rurales funcionen. Las intervenciones deberán informar y guiar la traducción de agendas globales como la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible (incluidos los ODS), la Nueva Agenda Urbana (NAU) y otras.
2. Gobernanza integrada
Fortalecer los mecanismos de gobernanza mediante la incorporación de los vínculos urbano-rurales en la gobernanza multisectorial, multinivel y multisectorial.
3. Enfoques basados en sistemas espaciales funcionales
Utilizar enfoques basados en sistemas para promover políticas y planificación urbanas, territoriales y rurales integradoras e inclusivas para apoyar el análisis del flujo de recursos como las personas, el agua, la biodiversidad y los alimentos.
4. Financieramente inclusivo
Asegurar y priorizar la inversión pública y privada sostenible para equilibrar y fortalecer los vínculos urbano-rurales. En la medida de lo posible, ajustar la financiación para cumplir los objetivos de desarrollo económico, social y ambiental integrado de las zonas rurales y urbanas.
5. Alianzas equilibradas
Fomentar asociaciones, alianzas y redes que vinculen a los actores urbanos y rurales con los diferentes sectores. Desarrollar y aprovechar las capacidades y habilidades de una amplia gama de partes interesadas, como la sociedad civil, el sector privado y las instituciones académicas, a través de procesos inclusivos y participativos.
6. Enfoques basados en los derechos humanos
Incorporar enfoques basados en los derechos humanos en todos los instrumentos y acciones de política para garantizar que las iniciativas y los procesos de desarrollo no afecten negativamente a los derechos humanos de nadie en todo el espectro urbano-rural.
7. No hacer daño y proporcionar protección social
Fortalecer los vínculos urbano-rurales para superar los conflictos, reconocer la diversidad cultural y reducir las desigualdades.
8. Sensible al medio ambiente
Los recursos que necesita la población actual deben abordarse sin comprometer la capacidad de las generaciones futuras para satisfacer las necesidades futuras.
9. Compromiso participativo
Garantizar una participación significativa de las personas, las instituciones locales y las comunidades a lo largo del continuo urbano-rural.
10. Basado en datos y evidencia
Establecer o mejorar los sistemas de conocimiento y llenar los vacíos de datos para que haya evidencia que respalde los métodos de planificación que reforzarán el continuo urbano-rural y mejorarán la cohesión territorial.Establecer o mejorar los sistemas de conocimiento y llenar los vacíos de datos para que haya evidencia que respalde los métodos de planificación que reforzarán el continuo urbano-rural y mejorarán la cohesión territorial.
Marco de acción
El Marco de Acción aborda las medidas para crear un entorno propicio y las medidas relacionadas con once puntos de entrada sectoriales y temáticos. Estos son:
Gobernanza, legislación y desarrollo de capacidades
Evaluar la capacidad y las necesidades de herramientas de política; mejorar el diálogo y la cooperación entre sectores y niveles de planificación; convocar nuevos mecanismos de gobernanza multinivel, multisectorial y multiactor, y apoyar la inclusión de las poblaciones urbanas y rurales afectadas.
Planificación integrada en todo el continuo urbano-rural
Apoyar la localización de la planificación nacional; integrar los vínculos urbano-rurales y el desarrollo territorial integrado en las políticas urbanas nacionales y promover redes y asociaciones de planificadores en diferentes jurisdicciones.
Inversión y financiación para el desarrollo urbano-rural inclusivo
Abordar y mejorar la financiación pública y privada y el acceso al crédito en todo el espectro urbano-rural, centrándose en los pueblos y ciudades pequeños e intermedios y en los territorios urbano-rurales integrados. Fortalecer los servicios de intermediación financiera y permitir la prestación de servicios ecosistémicos en zonas periurbanas y rurales.
Empoderar a las personas y las comunidades
Evaluar y apoyar procesos participativos y asociaciones inclusivos de múltiples actores; abordar y compensar directamente las desigualdades en todo el proceso urbano-rural con el fin de crear equilibrio e inclusión en los sectores informal y formal.
Gestión de conocimientos y datos para los flujos espaciales dinámicos de personas, productos, servicios e información
Mejorar la recopilación y gestión de datos y conocimientos desglosados espacialmente y por género, en particular garantizando un equilibrio entre la inclusión de los sectores estructurado e informal.
Desarrollo económico territorial y empleo
Coordinar el desarrollo económico urbano y rural para mejorar las sinergias; aprovechar el potencial de las ciudades pequeñas y medianas y aplicar innovaciones en esquemas participativos de crédito, finanzas e incubación de empresas para crear nuevos empleos que mejoren los flujos territoriales de productos, servicios e información.
Enfoques coherentes de la prestación de servicios sociales
Identificar las necesidades y oportunidades en las que los vínculos urbano-rurales más fuertes pueden repercutir en una prestación de servicios más equitativa desde el punto de vista espacial y social; poner a prueba nuevas asociaciones urbano-rurales para la prestación de servicios sociales y de salud fuera de las ciudades.
Infraestructura y comunicaciones
Realizar análisis integrados e inclusivos de las necesidades de infraestructura urbano-rural; planificar, financiar y construir conjuntamente infraestructura para agua, saneamiento, carreteras y transporte público, electrificación y comunicación, etcétera.
Enfoques integrados para la seguridad alimentaria, la nutrición y la salud pública
Incorporar la salud y el bienestar mediante la creación de enfoques urbano-rurales coherentes y vinculados para los sistemas alimentarios, hídricos, energéticos y sanitarios, prestando atención a los múltiples beneficios de la economía circular del nexo urbano-rural, especialmente cuando se combina con el desarrollo de capacidades y la inclusión.
Impacto ambiental y gestión de recursos naturales y tierras
Realizar evaluaciones ambientales estratégicas para reducir el riesgo ambiental de inundaciones severas, sequías, tormentas, etcétera; abordar la tenencia de la tierra y el agua y el uso sostenible de los recursos naturales, proteger la biodiversidad, promover sistemas de producción basados en ecosistemas y construir paisajes resilientes.
Conflictos y desastres
Evaluar los riesgos, las brechas y las poblaciones vulnerables en relación con las amenazas potenciales en las zonas urbanas, periurbanas y rurales; planificar conjuntamente medidas de resiliencia e invertir en todas las jurisdicciones para proteger los sistemas de transporte, energía, información, salud, educación, alimentación y agua, etcétera.
Conoce más y descarga la publicación Vínculos urbano-rurales: principios rectores y marco de acción para promover el desarrollo territorial integrado.